El Ministerio Público Fiscal investiga la amenaza de bomba recibida el viernes en el Penal de Chimbas y confirmó que la llamada habría sido realizada desde un número con prefijo de Buenos Aires, correspondiente a una línea ya dada de baja. Además, se habría utilizado un teléfono celular antiguo, sin sistema de geolocalización, lo que dificulta su rastreo. El hecho ocurrió durante la tarde-noche y derivó en un operativo interno de control en la institución penitenciaria. Si bien se activaron los protocolos de seguridad, no fue necesario evacuar el establecimiento. Desde la Fiscalía remarcaron que el ingreso de dispositivos móviles al Servicio Penitenciario es sumamente restringido, dado el riguroso sistema de control vigente. Hasta el momento no ha sido posible determinar el punto exacto desde donde se realizó la llamada, aunque se están analizando los registros de empresas telefónicas y otras herramientas tecnológicas para intentar identificar su origen.