La tarde del viernes 12 de septiembre se vio alterada en el Centro Cívico tras recibir dos llamados anónimos que alertaban sobre la posible colocación de una bomba en el edificio. Según fuentes preliminares, el primer llamado informó sobre la presencia de un artefacto explosivo sin aportar mayores detalles. Minutos después, un segundo aviso confirmó la amenaza y precisó que el dispositivo podría encontrarse en el segundo piso, aunque no especificó el área exacta. Actualmente, el escuadrón de bomberos trabaja en el lugar para evaluar la situación. Hasta el momento, no hay presencia de fiscales ni personal de la fiscalía, y las autoridades no han confirmado oficialmente la veracidad de la amenaza. Como medida preventiva, la avenida Libertador fue cortada al tránsito, lo que podría afectar el recorrido habitual del transporte público, en especial el servicio de colectivos. Las calles laterales permanecen habilitadas, aunque no se descarta ampliar los cortes si la situación lo amerita. Por ahora, no se ha informado sobre el estado de la calle Ignacio. Se aguarda que en las próximas horas las autoridades emitan un comunicado oficial con mayores detalles sobre la investigación y las acciones adoptadas.