Comenzó el juicio oral por la trágica muerte de Julieta Viñales, una joven de 18 años que falleció en marzo de 2020 tras una cirugía de amígdalas que derivó en graves complicaciones. La única persona imputada por este hecho es el médico Maximiliano Babsía, un otorrinolaringólogo acusado de homicidio culposo por mala praxis. El juicio comenzó con Babsía presentándose ante el tribunal en libertad y acompañado por sus abogados defensores, Fernando Castro y Federico Petrignani. La parte querellante está representada por la abogada María Cristina Naveda, quien actúa en nombre de la familia de Julieta. El juez Ricardo Moine está a cargo del proceso judicial, que se desarrolla bajo el sistema penal mixto, con elementos tanto escritos como orales para la producción de pruebas. Los Hechos Julieta Viñales, quien era estudiante de medicina en Buenos Aires, había regresado a San Juan para pasar las fiestas con su familia. Aprovechando la ocasión, se sometió a una operación de amígdalas en la clínica Cáceres de la provincia. El procedimiento, realizado por el médico Maximiliano Babsía, ocurrió en febrero de 2020, y según el médico, la intervención fue exitosa. Sin embargo, a los pocos días de la cirugía, Julieta comenzó a experimentar dolores intensos y, en poco tiempo, sufrió una hemorragia masiva. A pesar de los esfuerzos médicos, la joven fue diagnosticada con muerte cerebral veinte días después de la operación. La Investigación y la Autopsia Según la autopsia, la causa de su muerte fue una laceración en la arteria carótida derecha, una lesión que la querella sostiene que ocurrió durante la cirugía y que se rompió días después. La madre de Julieta, al enterarse de los resultados, expresó con pesar: "Tuvieron varias alarmas y muchas posibilidades de hacer algo mejor. Mi hija estaría con vida ahora". La Búsqueda de Justicia La familia de Julieta ha esperado más de cuatro años para ver avanzar el caso y encontrar justicia. Ahora, con el inicio del juicio oral, buscan esclarecer las circunstancias de su fallecimiento y responsabilizar al médico Maximiliano Babsía por lo que consideran negligencia médica. Por su parte, la defensa de Babsía intentará demostrar que la cirugía se realizó de acuerdo a los protocolos médicos establecidos y que las complicaciones que llevaron al desenlace trágico no fueron evitables. Este juicio no solo representa una lucha por justicia para la familia de Julieta, sino también un caso de gran relevancia en el ámbito de la responsabilidad médica.