Jorge Gil, el médico que cobró notoriedad tras su intervención como testigo en un juicio por violencia de género, será juzgado por falso testimonio. Así lo resolvió la Justicia este martes, al confirmar que su caso avanzará a juicio oral y público. Gil había prestado declaración hace un año en el proceso judicial que tuvo como imputado al funcionario judicial Mario Parisí, excoordinador de Flagrancia. Fue en ese contexto que su relato presentó contradicciones que llamaron la atención del tribunal. Durante la cuarta audiencia del juicio contra Parisí, el testimonio de Gil quedó bajo la lupa. Afirmó no conocer ni a la víctima ni a Juan Pablo Ortega, testigo y amigo del acusado. Sin embargo, la jueza Ana Carolina Parra advirtió incongruencias en su exposición y decidió ordenar su detención inmediata. Tras ser aprehendido, Gil fue sometido a una audiencia de acusación donde se le imputó formalmente el delito de falso testimonio. De ser hallado culpable, podría recibir una pena de entre 1 mes y 4 años de prisión. Según se desprende de la causa, el médico habría formado parte de una maniobra para evitar que la denuncia de la víctima prosperara. Las autoridades judiciales señalaron que su declaración no solo resultó incoherente, sino también funcional a los intereses del acusado, lo que motivó el proceso penal en su contra.