La Selección Argentina masculina de vóley afrontará el Mundial 2025 sin uno de sus emblemas más importantes de la última década. Bruno Lima, jugador fundamental en los mayores logros del equipo, renunció a continuar con el conjunto albiceleste, a tan solo semanas del inicio de la competencia que se desarrollará en Filipinas del 12 al 28 de septiembre. Con 29 años y tras una incorporación tardía a la pretemporada bajo las órdenes de Marcelo Méndez, el opuesto decidió dar un paso al costado. Aunque no se difundieron detalles, desde su entorno confirmaron que se trata de una decisión estrictamente personal, con intenciones de tomar una pausa definitiva en su ciclo con la selección. Ya tras disputar sus terceros Juegos Olímpicos en París 2024, Lima había manifestado la necesidad de descansar y replantear su futuro. A pesar de haber regresado brevemente este año, el desgaste físico y emocional, sumado a nuevas prioridades personales, aceleraron su salida del equipo nacional. Una trayectoria brillante con la camiseta argentina Desde su debut en 2014, Bruno Lima fue pieza clave en una de las etapas más exitosas del vóley argentino. Su carrera con la selección incluyó logros inolvidables como: Medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 Medalla de plata en los Juegos Panamericanos Santiago 2023 Mejor atacante en la Liga de Naciones FIVB 2019 Mejor opuesto del Sudamericano 2019 Máximo anotador y mejor atacante en Tokio 2020 Su partida representa una pérdida sensible para el equipo, ya que se despide uno de los máximos goleadores históricos de la albiceleste. En el próximo Campeonato Mundial, la Argentina integrará el Grupo C, junto a Francia, Finlandia y Corea del Sur. Con la salida de Lima, el cuerpo técnico deberá rearmar el esquema ofensivo en un contexto de plena renovación generacional.