En declaraciones a Canal 13 San Juan, el acusado relató cómo ocurrió el último encuentro con la niña y pidió que se investigue más a fondo el caso. “Estoy dispuesto, estoy nervioso. Quería contar mi parte, lo que hice con mi hija”, manifestó. Según su versión, el hecho se produjo en el marco del cumpleaños de su hermana menor: “Fue el cumple de mi hermana más chica, vinieron familiares y mi hija. Ella vino temprano a las 6 de la tarde y el cumple fue a las 9. En ese trayecto estuvimos jugando”. El sujeto sostuvo que la niña no durmió con él esa noche. “A las 3 de la madrugada se durmió en la cama de mis padres porque yo no tengo dónde hacerla dormir”, afianzó. Además, deslizó sospechas con respecto al entorno de la menor: “Ella ya venía con cosas de su casa, yo lo veo todo muy raro. Siempre le enseñé a cuidarse, cómo tiene que caminar una mujer en un mundo lleno de gente mala”. El imputado dijo que no se escondió y que esperaba que “todo se resuelva tranquilo”. “Estoy corriendo riesgo. Si hubiera sido yo, le pido al juez que me dé 30 años y que me maten, porque es lo que hay que hacer con los violines”, expresó. También, reveló su estado emocional desde que quedó detenido: “Estoy nervioso porque en la celda voy a estar pensando que a mi hija la han tocado y encima me culpan a mí. Ya escuché que la posibilidad de estar en el Servicio y eso es mucho”. Y finalizó pidiendo justicia: “Soy inocente y quiero que se haga justicia por mi hija, que ella esté bien y que pague el que tenga que pagar. Quisiera estar más tranquilo para que me interroguen. Me gustaría hablar con mi hija”. El hecho: Este viernes 1 de agosto, el juez de garantías Sergio López Martí dictó prisión preventiva por seis meses para el acusado, quien quedó alojado en el Penal de Chimbas mientras continua avanzando la investigación encabezada por el fiscal de ANIVI, Raúl Iglesias. El hombre se encontraba prófugo desde el fin de semana, tras la denuncia por abuso sexual de su hija de apenas seis años. La situación se agravó aún más la noche del jueves 31 de julio, cuando familiares de la menor y un grupo de vecinos se manifestaron frente a la casa del padre del sospechoso. En medio de gritos y furia, rompieron vidrios, lanzaron piedras y golpearon la vivienda con la intención de ingresar. La intervención de los uniformado fue muy importante para evitar que la situación se descontrole. Según fuentes judiciales, ese ataque fue determinante para que el hombre decidiera entregarse. En la madrugada del viernes, se presentó de manera voluntaria ante las autoridades y quedó a disposición de la Justicia, que ya había ejecutado una orden de detención en su contra. La denuncia había sido radicada días antes por la mamá de la víctima en la UFI ANIVI, luego de que la niña le cuente lo ocurrido. El fiscal Raúl Iglesias tomó intervención inmediata y activó el protocolo de búsqueda.  Con MV ya bajo custodia, el Ministerio Público Fiscal seguirá con la investigación correspondiente, la cual incluye la recolección de pruebas y la toma de testimonios claves para avanzar en la causa.