Un intenso terremoto de magnitud 8,8 sacudió este martes 29 de julio las aguas del Pacífico Norte, provocando alertas de tsunami en varios países. El epicentro del sismo se localizó a más de 130 kilómetros al sureste de Petropavlovsk, cerca de la península de Kamchatka, en Rusia, y a poca profundidad, lo que aumenta el riesgo de formación de olas destructivas. Entre las naciones en vigilancia se encuentran Japón, Chile, Hawái e Islas Salomón. En particular, Chile activó sus protocolos de prevención, mientras el Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada (SHOA) trabaja junto al Centro de Alerta de Tsunamis del Pacífico (PTWC) para analizar en detalle las características del evento sísmico. Aunque no se ha decretado una emergencia inmediata, se reconoció una amenaza potencial, en especial para Isla de Pascua, que podría ser el primer lugar afectado por un eventual tsunami. Alicia Cebrián, directora nacional del Senapred, confirmó que ya se están desplegando medidas preventivas. “El tsunami impactaría primero en Isla de Pascua, y los protocolos ya están en marcha”, aseguró. También explicó que se coordinará un comité de emergencia para determinar posibles evacuaciones con al menos tres horas de anticipación. Desde San Juan, las autoridades pidieron a los sanjuaninos residentes en Chile, o con familiares en ese país, que se mantengan atentos a los comunicados oficiales y sigan todas las indicaciones emitidas por las entidades chilenas. Por su parte, Japón fue el primer país en ordenar evacuaciones, especialmente en las zonas norte y central del archipiélago, ante la posibilidad de que se registren olas de hasta tres metros de altura.