Desde el césped del Hard Rock Stadium, la tarde se llenó de fútbol y emoción, aunque el resultado final no terminó de reflejar la entrega y el corazón puestos en la cancha. Boca Juniors cayó 2 a 1 ante el poderoso Bayern Múnich por la segunda fecha del Mundial de Clubes 2025. Harry Kane y Michael Olise marcaron para el conjunto alemán, mientras que Miguel Merentiel había anotado el empate transitorio para el Xeneize. Más allá del resultado, lo que quedó flotando en el aire y en el orgullo de cada hincha fue la certeza de que Boca estuvo a la altura y le jugó de igual a igual, de principio a fin, a uno de los gigantes del fútbol europeo. El partido comenzó con un Bayern decidido a imponer condiciones. A los 7 minutos, Michael Olise sorprendió con un córner olímpico que se metía directo en el arco, pero el tanto fue anulado por una infracción de Gnabry sobre el arquero Agustín Marchesín. Fue un respiro para la defensa boquense, pero también una señal de alerta. A los 17, llegó el golpe: tras un centro envenenado de Laimer y un despeje corto de Luis Advíncula, Harry Kane no perdonó y definió con categoría para el 1 a 0. Un comienzo cuesta arriba para Boca. Pero el equipo de Miguel Ángel Russo respondió con carácter y temple. A los 31 minutos, Agustín Marchesín se agigantó bajo los tres palos para tapar un mano a mano clarísimo a Olise, demostrando su jerarquía en el momento justo. Poco después, Kevin Zenón encendió las alarmas en el área rival con un potente zurdazo desde la derecha que obligó a Manuel Neuer a intervenir con firmeza. El partido se jugaba con intensidad y pierna fuerte, algo que se reflejó en las amonestaciones a Marcos Rojo (13') y Luis Advíncula (35'), en un duelo donde cada pelota se disputaba como si fuera la última. El primer tiempo se fue con ventaja mínima para los bávaros, pero con la sensación clara de que Boca seguía muy vivo. La segunda mitad mantuvo el vértigo. El Bayern buscaba liquidar el partido, pero el Xeneize tenía un arma letal guardada: su "Bestia" suelta. A los 20 minutos del complemento, llegó el estallido. Tras una pérdida de Olise en mitad de cancha, Boca armó una contra de manual. Carlos Palacios filtró un pase quirúrgico por la derecha para Miguel Merentiel, que quedó mano a mano. El uruguayo, fiel a su estilo, desairó con un amague a Staniši? y Tah, y definió con clase, cruzando el remate por encima de Neuer y logró poner el partido 1 a 1. A los 38 minutos, cuando el empate parecía reflejar con justicia lo visto en la cancha, el fútbol volvió a mostrar su cara más cruel. En medio de un área congestionada, Harry Kane tocó hacia atrás y Michael Olise, con precisión quirúrgica, definió bajo y contra el palo derecho de Marchesín. El 2 a 1 para el Bayern fue un verdadero golpe al mentón para un Boca que no merecía irse con las manos vacías. En el cierre, el propio Olise estuvo a punto de liquidarlo con un tiro libre que rozó el palo izquierdo, dejando un último suspiro de tensión antes del pitazo final.