El Gobierno reconoce que será complicado acelerar en la Cámara de Diputados el tratamiento del proyecto de ley de “Principio de Inocencia Fiscal”, diseñado para fomentar la incorporación al sistema financiero de los llamados “dólares del colchón”. Más allá del respaldo de los gobernadores, el oficialismo necesita sumar voluntades dentro de los bloques opositores más reticentes, como la Coalición Cívica, sectores del radicalismo y el espacio de Miguel Ángel Pichetto. Por el momento, no hay definiciones concretas sobre la convocatoria al plenario de comisiones que daría inicio al debate legislativo. Sin embargo, en el entorno libertario confían en que podrían habilitar la discusión durante la última semana de junio. “El Congreso está trabado y las comisiones también. Hay que ser cautelosos, pero la idea es avanzar lo antes posible”, señaló a Clarín un operador cercano al oficialismo. La iniciativa, impulsada por el ministro de Economía, Luis "Toto" Caputo, busca captar parte de los más de 250 mil millones de dólares que circulan fuera del circuito bancario. La comisión de Presupuesto está conformada por 49 diputados y para lograr el despacho de mayoría se necesitan al menos 25 votos. Hasta ahora, La Libertad Avanza cuenta con 6 integrantes propios y suma el respaldo de sus aliados: PRO (7), UCR (3), MID (2), Liga del Interior (1), Innovación Federal (2) y Producción y Trabajo (1), alcanzando un total de 22 apoyos. Por su parte, Unión por la Patria, que se mantiene unido tras la ratificación de la condena a Cristina Kirchner por parte de la Corte Suprema en la causa Vialidad, posee 20 votos, mientras que el Frente de Izquierda cuenta con 1 voto para rechazar la propuesta del ministro "Toto" Caputo. Ante este escenario, Martín Menem, presidente de la Cámara de Diputados, junto a Eduardo “Lule” Menem, asesor cercano a Karina Milei, y Santiago Caputo, deberán conseguir tres firmas más para alcanzar la mayoría. Las miradas están puestas en Encuentro Federal, liderado por Miguel Ángel Pichetto; Democracia para Siempre, que responde a Facundo Manes y Martín Lousteau; y la Coalición Cívica de Elisa Carrió. Dentro de los radicales disidentes, que tienen tres representantes, solo Jorge Rizzotti (afín al gobernador de Jujuy, Carlos Sadir) parece estar abierto a la presión oficialista. En cuanto a Encuentro Federal, la atención está en Ignacio García Aresca, cercano al gobernador cordobés Martín Llaryora, cuya postura será clave para el apoyo o rechazo del proyecto. Por ahora, Jorge Macri (CABA) aún no definió su postura, mientras que Maximiliano Pullaro (Santa Fe) pide modificaciones en la propuesta para proteger la industria de su provincia. Por su parte, Axel Kicillof (Buenos Aires) se niega a adherir al Régimen Simplificado de Ganancias y amenaza con aplicar impuestos a quienes decidan retirar los dólares del colchón.