Lo que comenzó como una serie de bloqueos en una cuenta de WhatsApp derivó en la revelación de un caso de abuso infantil con conexiones internacionales en la provincia de San Juan. Esta semana, un hombre domiciliado en Villa Aberastain, Pocito, fue imputado por distribución y tenencia de material de abuso sexual infantil. El acusado, identificado como D.R.P., fue formalizado por la Justicia tras comprobarse que desde 2022 realizaba pagos en dólares al exterior para acceder a contenido explícito con menores. Según detallaron los fiscales Eduardo Gallastegui y Maximiliano Yanzón, de la UFI de Delitos Informáticos y Estafas, dichas transacciones se efectuaban mediante transferencias enviadas desde Estados Unidos por su hijo. La causa adquirió relevancia internacional luego de que una ONG estadounidense especializada en la lucha contra la pornografía infantil denunciara que el imputado no solo consumía este material, sino que también lo distribuía, integrando una red con al menos seis personas más involucradas. Uno de los indicios que alertó a las autoridades fue el bloqueo reiterado, al menos siete veces de sus cuentas de WhatsApp, motivado por el uso de términos sensibles como “child” en los archivos compartidos. Cada vez que una cuenta era suspendida, el imputado cambiaba de número, lo que generó sospechas y dio inicio a una investigación más profunda. En la audiencia de control de detención, el juez Rodolfo Figuerola formalizó los cargos y dictó prisión preventiva domiciliaria por tres meses, mientras continúa el análisis de pruebas digitales y la trazabilidad de los pagos. El proceso penal seguirá en curso durante un plazo inicial de ocho meses, sin descartarse nuevas imputaciones conforme se esclarezca el alcance total de la red de distribución de material de abuso infantil.