Después de casi un mes internado en cuidados intensivos en el Hospital Rawson, Ramiro Fernández recibió el alta médica, aunque aún le queda un largo camino por recorrer. El joven fue víctima de una violenta agresión ocurrida el 24 de abril, a la salida de un boliche en Capital, cuando intervino para evitar una pelea. Fernández sufrió una fractura de cráneo tras recibir una trompada por la espalda y caer al piso inconsciente. El agresor fue identificado como Francisco Quiroz, quien está detenido junto a Guillermo Vidable, ambos acusados del ataque. La caída le provocó un trauma severo que obligó a una intervención quirúrgica de urgencia. Además, durante su internación, Ramiro contrajo meningitis, lo que complicó aún más su estado. A pesar de las dificultades, logró estabilizarse gracias al trabajo médico y su fuerza de voluntad. La próxima etapa implica una costosa prótesis craneal y un tratamiento de rehabilitación especial en Córdoba, principalmente enfocado en kinesiología. Aún con secuelas visibles, el joven expresó en una entrevista con Telesol que su mayor anhelo es volver a disfrutar de su familia y estar bien para su hija pequeña. El caso judicial El episodio tuvo lugar en las inmediaciones del boliche 'Ladran Sancho', donde Fernández intentó separar a una pareja que discutía. En ese momento, Quiroz lo atacó por la espalda y huyó del lugar junto a Vidable. Ambos están detenidos en el Penal de Chimbas y enfrentan cargos por lesiones graves. La causa está en etapa de investigación, bajo la órbita del fiscal Alejandro Mattar, y se espera que en los próximos meses avance hacia el juicio, donde se intentará probar la responsabilidad penal de los imputados.