A través de un extenso mensaje en su cuenta de Facebook, Rodolfo Bloch, quien hasta hace poco se desempeñaba como decano de la Facultad de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales, anunció públicamente su salida del cargo, una decisión que había formalizado la semana pasada al presentar su renuncia. Esta dimisión se dio en el marco de una denuncia por acoso sexual y laboral presentada por su exsecretaria privada. En su mensaje, Bloch reiteró su inocencia frente a los hechos que se le imputan, al tiempo que expresó que atraviesa un momento de gran tensión emocional debido a los recientes acontecimientos. Según su relato, se encontraba al borde de ser destituido por la Asamblea Universitaria, aunque decidió anticiparse a esta medida y presentar su renuncia. Un aspecto importante de su decisión es que, de haber sido removido del cargo, habría perdido la posibilidad de acceder a su futura jubilación, algo que logró preservar al presentar la renuncia antes de ser destituido.   El Comunicado Compelto: A mis colegas, compañeros y compañerasde la Facultad de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales de la Universidad Nacional de San Juan. En estos momentos de profunda conmoción personal e institucional, tengo la necesidad de comunicarme con ustedes, para expresarles lo que siento y despedirme como Decano, cargo que desempeñé durante tanto tiempo en esta Facultad y con todos ustedes. Como es de público conocimiento, me he visto forzado a presentar mi renuncia al cargo, como consecuencia de una operación montada sobre una falsa denuncia presentada en mi contra, cuyo objetivo fue quitarme la posibilidad de ser candidato a Rector en 2025, además de legitimar el accionar de la Oficina por la Igualdad de Género de la Universidad, cobrando como "pieza mayor" a un Decano, para poder exhibirlo como un logro, a costa del terrible daño personal que se me ha ocasionado. Para ello, se sustanció un sumario con muchas irregularidades, que no logró reunir pruebas que acreditaran las acusaciones en mi contra, lo cual fue advertido por los decanos/as y otros consejeros/as en la sesión del 19 de septiembre, en la que, por esas razones, no apoyaron el llamado a la Asamblea Universitaria para removerme del cargo, archivándose las actuaciones. Sin embargo, luego se montó una operación para desarchivar y volver a tratar el tema, resultando en que el 5 de diciembre, sin justificaciones ni explicaciones, los decanos/as y otros consejeros cambiaron su voto y se convocó la Asamblea. Sólo tres consejeros tuvieron la actitud ética de mantener su voto, a quienes expreso mi reconocimiento. A los demás, que su propia conciencia sea el juez que les demande haber priorizado la especulación electoral por encima del sentido de justicia, a costa de causarme un perjuicio incalculable. Ante ese panorama, y la certeza del resultado, decidí renunciar. Me voy con un profundo dolor, después de entregarle a la UNSJ cuarenta años de esfuerzo y compromiso, en los que construí una prolífica y reconocida trayectoria, sin mancha alguna. No merezco la infamia que se instrumentó en mi contra, porque no cometí las faltas de las que se me acusó y buscaré la reparación que en justicia corresponde. Pero también, me llevo con orgullo y satisfacción el mejor recuerdo de todo lo construido y vivido en la Universidad y especialmente en esta Facultad, donde pudimos, entre todos, obtener logros que están fuera de toda duda y que cimentaron un desarrollo tangible de nuestra Casa a lo largo de más de dieciséis años. Y me llevo, también, un hondo sentimiento de gratitud y reconocimiento hacia todos ustedes, que en sus distintas responsabilidades, son los artífices de todo lo logrado. Con todo mi afecto, Rodolfo H. Bloch.