Este lunes, la autopsia realizada al cuerpo de Carlos Quiroga, un obrero que fue hallado sin vida en un canal de Albardón alrededor de las 19:30 horas del domingo, reveló que no sufrió una muerte violenta: ‘murió por asfixia por inmersión, ahogado’, precisó un investigador.   La duda sobre el final de Quiroga se presentó ante los investigadores de homicidios que dirige el fiscal coordinador de la UFI de Delitos Especiales, Iván Grassi, cuando se supo que la víctima y un vecino suyo habían peleado; de hecho, Quiroga quedó con un ojo morado tras recibir un golpe a eso de las 11 del domingo. La autopsia sirvió para esclarecer el caso.