La tendencia a la baja del índice de inflación iniciada tras el pico del 25,5% registrado en diciembre de 2023 encontrará su primer freno en junio si se cumplen las proyecciones de los consultores económicos del Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del Banco Central. Para los analistas, el IPC de mayo llegará al 5,2% pero tanto junio como julio se ubicarán en 5,5%, levemente por encima del mes pasado. De esa forma, se interrumpirá la tendencia descendente que había comenzado con la llegada del nuevo gobierno, el fuerte ajuste fiscal y el “ancla cambiaria” que limita la suba del dólar oficial al 2% mensual. La curva de los pronósticos dejó de ser completamente en descenso como había ocurrido en todos los informes de este año. No obstante esos datos, el informe del REM correspondiente a mayo publicado hoy por el BCRA, del que participaron 36 bancos, consultores y otros expertos, marca una tendencia a la baja en la proyección de inflación en relación con la edición del mes pasado, en que las cifras esperadas para mayo y junio eran 7,5% y 6,8%, en lugar de 5,2% y 5,5%, respectivamente. En el caso de la inflación esperada para el año calendario 2024, los consultores esperan ahora un 146,4% mientras que el mes pasado habían pronosticado 15 puntos porcentuales más (161,3%).