El siniestro vial que terminó con la muerte de Lucía Rubiño (tenía 16 años) en el interior del barrio Profesional, en Rivadavia, sobre las 3 de la madrugada del pasado 15 de octubre y conmocionó a la provincia. Librará un nuevo capítulo en Mendoza, ya que el fiscal coordinador de la UFI de Delitos Especiales, Iván Grassi, pidió a la Fiscalía de esa provincia una nueva pericia accidentológica y la reconstrucción virtual de cómo ocurrió el accidente, en base al análisis de los videos de seguridad de un comercio y casas vecinas que captaron cómo sucedieron los hechos. La conclusión de esa nueva pericia es clave para la suerte de uno de los involucrados, Juan Pablo Echegaray (18 años, hijo del juez federal Hugo Echegaray), porque una pericia local lo desvincula del caso y esa conclusión va contra la sospecha que, hasta ahora, sostiene Fiscalía. Resulta que esa pericia ya estableció que fue el otro implicado, un menor de 17 años, el que invadió el carril de circulación del hijo del magistrado y pegó un volantazo para evitarlo, yendo a parar, ya sin control, hasta donde estaba la chica, aprisionándola contra una pared. Ese menor es investigado en la Justicia de la Niñez y la jueza María Julia Camus le imputó un homicidio con dolo eventual, que tiene las penas de un homicidio simple (8 a 25 años) y se configura cuando el autor se representa que con su acción puede causar la muerte de otro, pero se despreocupa de ese resultado y continúa ejecutándola. El defensor de ese chico, Nasser Uzair, ya apeló esa decisión y un tribunal debe resolver. En el caso del imputado mayor (el hijo del juez) Fiscalía sostuvo en la audiencia del 7 de noviembre pasado, que tuvo una "participación concomitante o paralela" al autor de un homicidio culposo (sin intención), porque transitaba en camioneta a "baja velocidad", invadió el carril del otro menor y frenó para evitar que lo embistiera. El otro conductor circulaba a elevada velocidad, pegó el volantazo para no chocar con el otro vehículo, pero no pudo frenar y mató a la chica. En ese momento, Fiscalía también le imputó al hijo del juez su participación en otro delito: "Crear una situación de peligro para la vida o la integridad física de las personas, mediante su participación en una prueba de velocidad o de destreza con un vehículo automotor, realizada sin la debida autorización de la autoridad competente". Es que aquella noche, previo al choque mortal, numerosos vecinos llamaron al 911 para avisar que unos jóvenes transitaban a elevada velocidad dentro del barrio, hacían picadas o participaban en desafíos como el "Gallito Ciego", en el que aceleraban enfrentándose hasta que uno desistía. Según Fiscalía, algunos testigos señalaron a Echegaray como partícipe en esas maniobras y por eso también le imputó ese ilícito. El día en que terminó imputado, el joven también fue inhabilitado para conducir.