El fiscal Leandro Arévalo, encargado de esclarecer la muerte de Agustina Kuhn, la joven de 17 años que murió en la madrugada de hoy tras caer de un octavo piso en el Gran Hotel de Mar del Plata —donde se hallaba en su viaje de egresados—, cree de acuerdo a las pruebas en el expediente que la joven perdió la vida a causa de un accidente. El suicidio, por lo pronto, se encuentra descartado. Los testimonios de los compañeros que se encontraban con ella, así como la autopsia, no revelaron ningún elemento de criminalidad para imputar un homicidio. Según declararon sus compañeros del colegio San Antonio de Padua de Mercedes, Agostina se dirigió con al menos dos de ellos a la habitación de otro compañero tras regresar de una discoteca local. Allí, intentó subirse a una baranda en una ventana que da al frente del edificio. Tras intentar treparse, a pesar de las advertencias de los chicos que la acompañaban, según declararon ellos mismos, finalmente subió y cayó. “No tenía de qué agarrarse en esa ventana”, afirma un investigador. La autopsia, practicada en la Morgue Judicial marplatense, marcó un cuadro de politraumatismo como la causa de muerte. Agostina cayó de pie: el impacto llevó al estallido de varios órganos, con un raspón compatible con la trayectoria de su caída, según revelaron fuentes del caso. El expediente continúa calificado como averiguación de causales de muerte. Arévalo aguarda las pericias toxicológicas al cuerpo. También, planea revisar testimonios y esclarecer qué ocurrió en la discoteca que Agostina visitó con sus compañeros antes de su muerte. Sin embargo, no hay indicios para sospechar de un crimen en todo el caso. De acuerdo a las primeras informaciones, la caída de la joven fue directa hacia un patio interno, donde quedó tendida. Inmediatamente, los presentes en el lugar dieron aviso al 911 y llegó al lugar una ambulancia del SAME que le dio asistencia urgente. No obstante, cuando el personal se encontró con la estudiante, la joven ya se encontraba sin signos vitales. Según informaron, murió en el acto producto del impacto. Los alumnos de la escuela San Antonio de Padua de Mercedes habían pasado los últimos días en Mar del Plata, donde se trasladaron en el marco de su viaje de egresados del secundario. Según estaba estipulado, el curso del cual formaba parte la víctima debía emprender el regreso este viernes hacia su ciudad. A pesar de los hechos sucedidos en las últimas horas, el contingente de alumnos volvió de todas formas en las primeras horas de la mañana.