Este miércoles, el narcotraficante más conocido de San Juan, junto a sus cómplices,  fue condenado por la Justicia Federal. Entre otras cosas, el involucrado fue acusado por vender drogas dentro del Penal de Chimbas. Se trata de Víctor 'Chato' Camargo, quien recibió 11 años de prisión, mientras que su socio Cristian Sánchez y su hermano Juan Enrique Camargo fueron castigados con 7 años y 6 meses y 7 años, respectivamente. Si bien los cabecillas de la banda narco habían sido condenados por la comercialización de estupefacientes tras las rejas, un tribunal superior revocó la sentencia y ordenó que el juicio se llevara adelante otra vez. En esa oportunidad, la Cámara Federal de Casación Penal anuló parte del mayor caso de drogas en la provincia, con 33 imputados, y ordenó hacer un nuevo debate para 3 de ellos. Fue por ese motivo que los sujetos vinculados a la causa volvieron a sentarse en el banquillo de los acusados, con la condición de que no se les impusieran penas mayores a las que habían recibido en el marco del juicio abreviado. Como consecuencia, uno de los acusados, Sánchez, se vio beneficiado por la pena que finalmente recibió. Tal y como sucedió en aquella primera instancia, el 'Chato' Camargo y su familiar, conocido como el 'Rengo' recibieron 11 y 7 años respectivamente; mientras que Sánchez, señalado como la mano derecha del líder de la organización criminal, que había sido castigado con 8 años, recibió medio año menos de prisión. Camargo había sido trasladado a Buenos Aires -al Penal de Marcos Paz- al igual que Sánchez -derivado al Penal de Ezeiza- por orden del juez federal Leopoldo Rago Gallo, ya que tras ser detenidos siguieron manejando el tráfico de drogas por teléfono desde la prisión. La defensa del 'Chato' Camargo, a través de De Dax, había pedido anular el juicio abreviado a pesar de su firma en acuerdo. En su reclamo, aseguró que había admitido su responsabilidad y aceptó el mayor castigo de todos los imputados, dado que le habían prometido su traslado a San Juan. Resulta que habría confesado vivir un calvario en la prisión porteña. Pero como esa promesa no se concretó, decidió deshacer el acuerdo.