Jueves 25.04.2024
Actualizado hace 10min.

Estudiantes de una escuela de Chimbas exigieron mayor seguridad por varios asaltos en la zona

Padres y directivos se mostraron desesperados por la situación.

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Un grupo de estudiantes de la escuela secundaria Federico Cantoni en Chimbas realizaron una protesta en la puerta del establecimiento para pedir por mayor seguridad, luego de que un joven que concurría al colegio fuera asaltado brutalmente por delincuentes.

El adolescente se bajó del colectivo y cuando se disponía a ingresar, desconocidos lo golpearon y le robaron. El joven fue atendido por una ambulancia debido a los golpes que sufrió.

Padres y docentes de la escuela, ubicada en Centenario antes Ruta 40, revelaron que no es la primera vez que ocurre, que a otros chicos también les tocó pasar por situaciones similares cuando llegan al colegio. 

"Son muchos los hechos de inseguridad y los chicos ya no aguantan más, por eso se están manifestando. Hoy bajando del colectivo, a uno lo agarraron y le pegaron", contó una de las docentes. 

En otra circunstancia, a otro estudiante, le sacaron su teléfono celular amenazandolo con un arma. "Esta escuela ya viene siendo blanco del vandalismo permanentemente. A los chicos les roban, les pegan, les tiran piedras", agregó otra profesora.

Cansados de tanta inseguridad, los estudiantes realizaron una protesta en la puerta de la escuela y debatieron qué medidas tomar en una especie de asamblea improvisada. Muy preocupada, también la directora apoyó el pedido de más seguridad.

"Estamos haciendo una nota para enviar a la Municipalidad, al Ministerio de Educación y a la Comisaría 17ª. También a quien corresponda en Seguridad; los chicos estuvieron todos de acuerdo. Estamos cansados de que pasen estas cosas. Hace unos días, en un acto escolar, empezaron a tirarnos piedras", afirmó una alumna.

"Supuestamente iban a poner patrulleros cuando estuviéramos afuera, pero vinieron dos días y luego no aparecieron más", reclamó otro de los estudiantes.

Los padres y madres también se involucraron porque ya no soportan más que sus hijos sean el blanco de los delincuentes que hacen y deshacen a su antojo. "Recién llego de la escuela, es un desastre. No quiero que mis hijos sigan así, es un calvario para ellos, hay que tomar medidas porque ya no se puede seguir así", comentó angustiada una mamá.