Después de que ayer el tribunal conformado por Javier Figuerola, Verónica Chicón y Ana Lía Larrea declarara culpable a Paolo Enrique Carbajal por el asesinato a su padre Miguel Ángel Carbajal, este miércoles se confirmó la sentencia de prisión perpetua para el homicida. El hecho ocurrió el 14 de noviembre del año pasado en la casa del progenitor en Villa Huarpe, Pocito. Según la reconstrucción de la Fiscalía, Paolo llegó de Salta a San Juan una semana antes del asesinato y se alojó en diferentes hoteles para "despitar". El sujeto tenía un juego de llaves, por eso ingresó a la vivienda sin ejercer violencia y apuñaló a su padre mientras dormía en la habitación. Luego, simuló que recién llegaba a la provincia tras la muerte de Miguel Ángel. Para el fiscal coordinador de la UFI Delitos Especiales Iván Grassi, las maniobras que aplicó Paolo fueron premeditadas, es decir que el joven ideó el crimen. El investigador acusó al agresor por homicidio doblemente agravado: por alevosía y por el vínculo existente entre ellos. Por otro lado, la defensa representada por César Jofré, pretendía que se lo castigara por un homicido simple, que comprende penas menores (de 8 a 25 años de prisión). Si bien el letrado no tuvo éxito, confirmó que apelará el fallo ante un tribunal superior.