El lunes 11 de octubre un docente, llamado Gerardo Terrera, contaba que le habían robado el carro de comidas con el que trabajaba todos los días. Tras casi 20 días de búsqueda las autoridades pudieron encontrar este local gastronómico rodante, pero no de la manera que deseaban. Personal policial lo halló, pero lo más triste el carro estaba totalmente desmantelado. Lamentablemente el carro de comidas ya había sido cortado para poder modificarlo y utilizarlo como carro de carga. Los delincuentes ya lo habían dividido y cambiado de color para que quedara irreconocible. Además, en el sitio se secuestraron la pancheta, la freidora y la plancha carlitera que Terrera guardaba en su carro. En la misma medida se procedió a la detención de un hombre de apellido Veja, mayor de edad, haciendo constar que sigue la investigación para establecer donde fueron vendidas las chapas que desmontaron del carro de comida.