Tras el divorcio definitivo de Sabrina Rojas, Luciano Castro se erigió en uno de los solteros más codiciados de la farándula, por todo lo que implica su figura, su relevancia y su belleza descomunal. Desde la ruptura del matrimonio, el actor mantuvo bajo siete llaves su aspecto amoroso. No obstante, la modernidad de la conectividad excesiva y los dispositivos celulares le jugaron una mala pasada a Luciano y quedó envuelto en una prueba irrefutable del nuevo romance que acaba de iniciar y que enciende una verdadera bomba, merced a la importancia de la mujer. Castro sintió el llamado de un encantamiento con Flor Vigna, nada más y nada menos. Así, la talentosa bailarina y el actor transitan por un apasionado periodo de vínculo mágico. Claro que ambos optan por el perfil bajo, pero la filtración de una imagen los atrapó. En LAM realizaron una investigación, a partir de una captura de una cámara de vigilancia en la que se lo ve a Castro en su camioneta y una mujer muy bella. Esa dama está vestida de entrenamiento y las zapatillas la delataron, porque el calzado terminó de confirmar la identidad de Vigna.   En el ciclo de eltrece, Maite Peñoñori contó: “Esto fue en Chacarita, la dejó tipo 11, no sé si volvían del gimnasio o iba a llevarla". Para agregar el dato clave para confirmar el romance: "Si uno hace zoom en las zapatillas se ve que son las mismas que utiliza Flor para entrenarse en videos subidos por ella misma en otras historias. Y con lo que me habían contado dos testigos que lo vieron…". Y en todo esto brota los testimonios de personas que los divisaron en un gimnasio de zona norte: "Están desatados, la están pasando bomba. Los dos están solteros, no le tienen que dar explicaciones a nadie.  Flor suele entrenar con Julieta Puente y casualmente Luciano empezó a entrenar ahí". Y para culminar, Maite exclamó: “El viernes los vieron que se fueron en la camioneta de él, y ayer lunes estuvieron a los besos a puro apriete en el gimnasio".