Viernes 19.04.2024
Actualizado hace 10min.

La historia detrás de la foto de Lara Arreguiz, la joven de 22 años que murió por COVID-19

En la imagen se la ve dormida, sin cama ni atención, apenas tapada por una campera para protegerse del frío. La madre relató lo que sucedió ese día.

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Lara Arreguiz tenía 22 años. Su foto recostada en el pasillo del Hospital Iturraspe, en Santa Fe, solo horas antes de morir conmovió al país al exponer la crudeza de la segunda ola de contagios de coronavirus y la situación crítica de un castigado sistema de salud.

En la foto está dormida, sin cama ni atención, apenas tapada por una campera para protegerse del frío. Claudia Sánchez, la mamá, explicó lo que sucedió desde que le confirmaron que era positiva en COVID-19 y por qué se acostó en el pasillo, pese al frío y los dolores.

La mujer relató el lunes que, tras una primera consulta en el hospital Protomédico, en la que le realizaron placas y estudios, la enviaron a la casa. Sin embargo, al empeorar su síntomas, decidió acompañarla nuevamente al centro de salud para que recibiera atención adecuada.

No murió en un pasillo, sino en una terapia intensiva a la que le costó mucho llegar, porque estuvo un día y medio esperando una cama”, dijo Sánchez en diálogo con Telenoche. Luego de un hisopado comprobaron que la joven tenía coronavirus y que además tenía neumonía bilateral. “Estuvo casi 9 horas esperando atención, no fue rápido como dijeron los médicos”, remarcó.

“Tenía todo para ser internada pero ahí no tenían lugar. La llevé al Hospital Iturraspe, ella se sentó muy descompuesta y me decía que se iba a desmayar. Se puso a llorar y la hicieron ingresar a la enfermería y después otra vez a esperar en un pasillo”, relató. “Ahí me dijo que se quería acostar, mientras esperaba que la llamara el médico. Vi una camilla y consulté si podía utilizarla y me dijeron que no, imagino que por protocolo. Entonces Lara me dijo que se iba a acostar igual”, indicó.

Por eso se acomodó en el piso. Le dije que estaba frío y sucio, pero insistió, así que pusimos una campera que ella llevaba y un bolsito mío, y una señora que estaba en la guardia la tapó con otra campera”, detalló sobre lo sucedido. “Un médico o enfermero que pasó, la levantó y se la llevó a la guardia. Le administraron oxígeno y se calmó”, agregó.

Arreguiz tenía 22 años y era insulinodependiente desde los 10 años. “Cuando la atendieron le dieron un antibiótico más. No la internaron porque no había camas me dijo el médico”, recordó la mujer.

Según su duro relato, la espera se extendió y se volvió más dolorosa porque dejó de recibir noticias. “Después me dijeron que la iban a dejar en la guardia porque era paciente de riesgo. Me quedé ahí esperando y pasaron las horas y ella me mandó un mensaje diciendo que tenía hambre”, contó. “Además me pidió que le alcance la mochila así se medía el azúcar porque nadie se la había controlado”, agregó Sánchez.

Lara colaboraba con una asociación protectora de animales. (Foto: Facebook S.O.S. Caballos)

La joven quedó internada y a los pocos días la trasladaron a terapia intensiva, donde finalmente murió. “Me llamó el papá de Lara a las tres de la mañana para avisarme que había muerto, que había tenido tres paros y no pudieron hacer nada. Es algo horrible, no se lo deseo a nadie”, expresó la mamá.

Además de estudiar veterinaria, Lara formaba parte de la asociación S.O.S Caballos Santa Fe. Desde las redes sociales de la entidad, lamentaron la pérdida de la joven. “Colaboradora de hace años, compañera y amiga de todos, defensora sin igual por los derechos de los animales. Siempre dispuesta a colaborar de la manera que sea. Llegó con la idea de ayudar caballos, y lo hizo. Pero también encontró su verdadera vocación. Se nos fue una de las grandes, de aquellas que dan una ayuda desinteresada al animal, de las que harán todo ante una injusticia por y para ellos”, escribieron.

Con información de Todo Noticias.