A la navegación siempre dificultosa, en esta jornada de 676 kilómetros totales y 453 de ellos de velocidad, se han sumado piedras de todos los tamaños que se convirtieron en un peligro constante. Esto se agrava cuando se transita con baja visibilidad por la polvareda que provoca el tránsito de los vehículos, convirtiendo a esa superficie en verdaderas trampas para los competidores.  Para Manu el día fue bueno, en todo el sector veloz del inicio se mantuvo entre los 3 mejores y sostuvo esa posición hasta cerca del final donde cedió algunos minutos producto del cansancio arrastrado de días anteriores. En líneas generales ha sido un día positivo en el cual terminó ocupando el quinto lugar a 16’46’’ de la punta. En la general mantiene la misma quinta posición, achicando algunos segundos con el cuarto, el polaco Rafal Sonik. “Etapa larga la de hoy. Pude encontrar un buen ritmo que me llevo entre los 3 primeros durante casi todo el especial. El último sector de la etapa estuvo muy demandante, con muchísima piedra. El esfuerzo de ayer en la remontada se hizo sentir y cedí algunos minutos. Estoy entero, el cuatri también, asique a seguir empujando, queda mucho por delante”, fueron las palabras del corredor, luego de culminar la etapa.  Ahora espera el quinto día de competencia tendrá su comienzo en Al Ula y su finalización en Há’il. La arena comienza a hacerse presente para ser de aquí en adelante verdadera protagonista del Dakar Saudí. Los participantes comenzarán a ver grandes colinas, algunas con vegetación y rodeadas de enormes formaciones rocosas, las cuales dibujarán un paisaje muy particular. Serán 210 kilómetros de enlaces y 353 de especial. Las Dunas ya están cerca.