Después de que el Gobierno eliminara el Impuesto al Valor Agregado (IVA), que grava a los productos en un 21%, a 13 alimentos de la canasta básica hasta fin de año, algunas cadenas de supermercados van a empezar a vender algunos alimentos, bajo esa modalidad, desde este sábado. Walmart señaló que -"a partir del sábado 17 de agosto- todos sus clientes podrán encontrar ya más de 1500 productos, en 13 categorías, sin IVA", señaló un comunicado de la cadena norteamericana. La reducción a 0% de la alícuota impacta en el precio final de una canasta importante de productos básicos y de primera necesidad, en rubros como: aceite de girasol, maíz y mezcla; arroz; azúcar; conservas de frutas, hortalizas y legumbres; harina de maíz; harinas de trigo; huevos; leche fluida entera o descremada con aditivos; pan; pan rallado y/o rebozador; pastas secas; yerba mate, mate cocido y té; y yogur entero y/o descremado, informó la empresa. Este anuncio estará vigente en 92 tiendas de Walmart y Changomas, hasta el 31 de diciembre. Así como también en su plataforma online, señaló la cadena. También Carrefour, ofrecerá desde mañana, más de 2000 productos sin IVA en sus 585 sucursales. "Quienes visiten los supermercados tendrán acceso a esta propuesta, en las categorías de aceite, arroz, azúcar, conservas de frutas, hortalizas y legumbres, harina de maíz y de trigo, huevos, leche, pan, pan rallado y/o rebozador, pastas secas, yerba, mate cocido, té y yogur entero y/o descremado", apuntó la cadena francesa. Paralelamente, los supermercados más chicos del interior del país, salieron a apoyar la medida adoptada por el Gobierno para incentivar el consumo. "Va en el sentido correcto para que los consumidores puedan acceder con menor dificultad a los productos de la canasta alimentaria", señalaron. Una fuente vinculada a CAS y FASA, las cámaras que agrupa al sector comentó que "algunos supermercados implementarán la medida mañana y otros que tienen programas menos dúctiles demorarán unos días. Pero la semana que viene, seguramente van a estar todos en funcionamiento", dijo. Las cadenas nucleadas en CAS y FASA habían manifestado que "resultaba imperioso actuar ante la realidad de que, -en muchos casos-, hasta el 50% del precio de los productos que venden, está conformado por impuestos", señalaron. También a través de un comunicado, ambas cámaras empresarias apoyaron la medida implementada por el decreto 567/19 y señalaron que no debería ser una medida aislada, sino que forme parte de una política de fondo, que apunte a aliviar los graves problemas económicos que enfrenta la población, También advirtieron que la medida "resolverá el tema la elevada presión fiscal". Previamente, el presidente de la Asociación de Supermercados Unidos (ASU), que agrupa a las cadenas más grandes del país, Juan Vasco Martínez, había dicho que era necesaria "toda una operación con sistemas y analizar casi referencia por referencia", para poner en práctica la movida. Pero estimó que algunas cadenas podrían aplicarla desde el sábado. Sobre el potencial de la medida oficial y su efecto concreto sobre los precios, un análisis del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), advirtió que "para un alimento de la canasta básica gravado con una alícuota del IVA del 21%, se verá una reducción en su precio respecto a los valores pasados, sólo si la depreciación del peso de esta semana no se tradujo en aumento de sus precios superiores al 21%. Por su parte, para productos gravados al 10,5% previamente, si el aumento del dólar impulsó a sus precios en menos del 10,5%, podrían observarse reducciones en su precio en comparación a los de la semana pasada, consignó el instituto. Sobre las críticas que recibió el Gobierno a partir de la decisión de suprimir el IVA a los productos de la canasta básica, hoy el ministro de la Producción Dante Sica, tuiteó: "¿Alguien puede estar en contra de que hoy los argentinos no paguen IVA cuando compran leche, pan, fideos, aceite, huevos, arroz y yerba? El Presidente está tomando medidas urgentes que ayudarán a millones de argentinos", dijo el funcionario. FUENTE: Clarín