Jueves 25.04.2024
Actualizado hace 10min.

El gobierno nacional no lo ve a Uñac apoyando a Cristina

Tras el volantazo que dio la ex presidenta al anunciar la fórmula que competirá en las elecciones nacionales por el denominado Frente Patriótico, en el que irá de candidata a vicepresidenta de Alberto Fernández, en el Ejecutivo nacional hicieron un mapeo para saber los gobernadores que se sumarán a esa ambiciosa estrategia –incluso con llamados telefónicos a distintas jurisdicciones del país- y no consideran que Sergio Uñac haya avalado en forma definitiva a ese armado del PJ.

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Para la Casa Rosada no es definitivo el apoyo de Sergio Uñac a la fórmula Alberto Fernández-Cristina Fernández y consideran que el mandatario sanjuanino sólo va a definir su articulación con alguno de los peronismos a nivel nacional tras las elecciones del 2 de junio en las que espera ser reelegido por amplio margen.

El anterior fin de semana, en el que la ex presidenta Cristina Kirchner pateó al tablero al anunciar que se corría de la candidatura presidencial y se ponía debajo de su ex jefe de Gabinete, el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, rastrilló los efectos del cimbronazo político con diferentes llamados telefónicos gobernadores con los que mantiene buena sintonía.

Una de las comunicaciones tuvo como destinatario a Uñac quien, como contó este medio hace una semana, había manifestado un apoyo parcial a la nominación de Cristina de la fórmula del denominado Frente Patriótico. En privado, Frigerio cuenta que se llevó la misma sensación de su diálogo con el mandatario sanjuanino. “Está muy metido en su campaña. No va a hacer nada hasta después del 2 de junio”, le ha señalado a sus interlocutores en su despacho de la planta baja de Casa Rosada.

De hecho, en la cartera política nacional distribuyeron en los últimos días un “semáforo de Gobernadores sobre la fórmula Alberto – Cristina”, elaborado en base al apoyo brindado al binomio del PJ y al peso electoral de cada distrito (de acuerdo a su población), que va en esa misma sintonía.

En este sentido, el semáforo mostraba que 10 mandatarios tenían “color verde” (de apoyo) y representaban un 13,8% del electorado: Roxana Bertone (Tierra del Fuego), Carlos Verna (La Pampa), Lucía Corpacci (Catamarca), Sergio Casas (La Rioja), Gerardo Zamora (Santiago del Estero), Alberto Rodríguez Sáa (San Luis), Juan Manzur (Tucumán), Gildo Insfran (Formosa), Domingo Peppo (Chaco). En “color amarillo” (apoyo a medias) con un 4,9% del electorado sólo fueron registrados Sergio Uñac (San Juan) y Gustavo Bordet (Entre Ríos); y en “color rojo” (no se manifestaron, en contra) con un 80.4% del electorado, Mariano Arcioni (Chubut), Miguel Lifschitz, (Santa Fe), Juan Schiaretti (Córdoba), Juan Manuel Urtubey (Salta), Alberto Weretilneck (Río Negro), Omar Gutiérrez (Neuquén), Hugo Passalacqua (Misiones), Gustavo Valdés (Corrientes), Gerardo Morales (Jujuy), Alfredo Cornejo (Mendoza), María Eugenia Vidal (Buenos Aires) y Horacio Rodríguez Larreta (CABA).

Más allá del esquema planteado, elaborado con arbitrariedad porque el grupo mayoritario no avala uniformemente al Ejecutivo nacional, en Casa de Gobierno saben que un peronismo unificado sería un rival muy difícil de vencer. “Lo vimos en las provincias, el peronismo unido es fuerte”, se sinceró Frigerio en privado. Por eso, en el oficialismo nacional apuestan que Alternativa Federal, la fuerza a la que Uñac envío algún guiño en alguna ocasión, se consolide como una fuerza competitiva de caras a las elecciones primarias del 11 de agosto y a las generales del 27 de octubre.