Martín Cortez tiene 34 años y conmovió a los sanjuaninos con su historia de lucha. "Durante el día trabaja de albañil, durante la noche, se desconecta de la dura jordana laboral para entrenar kick boxing, "lo que le apasiona"". Así empezaba el relato de un soñador que, despúes 6 años de durisimo entrenamiento, logró su tan anhelado título argentino de kick boxing. Tras un duro campeonato, realizado el domingo pasado en el emplemático estadio Julio Mocoroa, boxeadores de todos los rincones del país se disputaron el tan deseado cinturón, y Martín logró coronarse como campén y dejar el premio mayor en San Juan. El sanjuanino asegura que el título argentino es su "primer gran paso", de lo que él espera que sea una larga y exitosa carrera como boxeador. Este premio, será la llave que le abrirá las puertas a competencias internacionales.