Pasaron dos años y nueve meses para que el caso de Liam, un bebé que sufrió quedamduras por mala praxis médica, tenga una solución. La fiscalía tomó la decisión de embargar a Verónica Fernández, gerente de la Clínica Mayor, con 600 mil pesos, al médico Mario Gabriel Tripolone, con 400 mil pesos, y la enfermera Marisa Natividad Garay, con 150 mil pesos. Además, investigan a una obstetra y una enfermera por brindar falso testimonio por el aberrante caso, ocurrido en la entidad de la localidad de Concepción.