Mientras la Justicia de Estados Unidos es testigo de cómo ex dirigentes de la FIFA y allegados sacan a la luz las turbulentas asociaciones ilícitas, el ente regulador del fútbol evalúa un cambio de sede para el Mundial del 2022. Qatar compró varios votos mediante millonarios sobornos para quedarse con la localía del Mundial que le sigue al de Rusia. Mientras la Justicia estadounidense sigue recopilando información sobre el FIFA Gate, veedores de la FIFA fueron a Estados Unidos, México y Canadá para evaluar el estado de algunas canchas como posibles sedes del 2022 en reemplazo de Qatar. La prensa mexicana reveló que el cambio podría darse en lo inmediato, para desbancar la confusa e ilegal designación del país asiático. En el 2010 Qatar fue elegida sede de la Copa del Mundo para el 2022, en la designación con más antelación de la historia de los Mundiales y en la primera en la que se eligieron dos sedes en simultáneo.