Pablo Álvarez, líder de la barra brava de Independiente, se entregó en el Polo Judicial de Avellaneda luego de permanecer prófugo de la Justicia desde el martes pasado y ser buscado por Interpol. “Bebote” como lo llaman en las tribunas, tenía una perimetral por ser acusado de amenazar al técnico Ariel Holan, será indagado por privación ilegal de la libertad y extorsión por la fiscal Laura Carvallal. Ayer jueves fue allanada su casa del barrio de Palermo, donde personal de la Policía Bonaerense secuestró documentos, cuatro celulares, ropa, carnets del club y un gorro del Rojo con la inscripción "Bebote Presidente". El hecho investigado se originó el pasado 19 de octubre cuando Holan salió del entrenamiento en Villa Domínico y se dirigía en auto hacia su casa. En ese momento fue interceptado por un grupo de barras encabezado por Bebote, quien le exigió 50 mil dólares al DT para ir al Mundial de Rusia 2018. "En la próxima asamblea hablaremos de echar a Bebote", había declarado Héctor Maldonado, secretario de Independiente, en la previa del duelo ante Nacional en Paraguay por la ida de los cuartos de final de la Copa Sudamericana.